¿Cómo definiría usted la posición actual de Grupo Interóleo en el mercado internacional de del aceite de oliva?, ¿qué balance hace de vuestra posición actual en el mercado?
La verdad es que cada año, cada campaña, nuestra presencia a nivel internacional es mayor, con mayor volumen y mayor comercialización y facturación. Hoy día, en base a las producciones medias que estamos gestionando como empresa, estamos hablando de que aproximadamente el 1,5 % de la producción mundial la estamos gestionando desde Interóleo. Recordad que somos un grupo que concentra la oferta del sector productor, fundamentalmente de la provincia de Jaén, pero también de Córdoba, Málaga, Granada, Ciudad Real y Badajoz. Por lo que nuestro nivel de exportaciones, año tras año, cada vez es mayor, por supuesto.
¿Cuáles son sus principales mercados y qué cuota de mercado ocupan aproximadamente?
Actualmente, nuestro mercado más importante, a nivel de volumen, es el mercado de Italia como lo lleva siendo desde hace ya muchas décadas en España. Sin embargo, estamos teniendo en los últimos años penetración en nuevos mercados, fundamentalmente en Sudamérica; que es un mercado donde el aumento del consumo de aceite de oliva se incrementa año tras año; al final existe allí una Asociación llamada “Aceite de Oliva Salud”, que está calando y siendo asumida por el consumidor. Además, Sudamérica es una zona geográfica que está teniendo muy buena acogida de nuestro producto. Por supuesto, también están dos zonas fundamentales como son el sureste asiático, fundamentalmente China, y también la parte de Norteamérica.
Estas son las 3 zonas geográficas donde estamos creciendo y donde consideramos que están los mercados más emergentes y atractivos para nuestra actividad. Al final estamos hablando de que ellos vienen de consumos per cápita, consumos de aceite de oliva por persona y año muy bajos, por debajo de los 2 litros por persona y año y, con lo cual, el potenciar el crecimiento es muy importante y el asociar nuestro producto con la dieta mediterránea también es un factor clave, ya que esta dieta cada vez tiene mayor presencia fuera de Europa. Esto a las zonas productores y a empresas como la nuestra nos facilita mucho el poder acceder a nuevos mercados que hasta ahora su consumo era prácticamente insignificante.
Sí, exacto. Al final el producto español, en concreto el aceite de oliva, es muy valorado en el mercado exterior, ¿no?
Pues la verdad es que sí. Cuando tenemos presencia internacional en ferias o hablamos con clientes potenciales, es cierto que la marca España y el aceite de oliva virgen español tiene un significado muy importante para ellos, de garantía, de tradición, de respeto al medio ambiente y, sobre todo y, ante todo, de calidad. La calidad es el factor más importante y en los últimos años la hemos impulsado. Hemos trabajado en dotar de más calidad los procesos de recolección y obtención del fruto, y eso ha conseguido mejorar sensiblemente la zona productora andaluza y así, poder ofrecer y obtener las mejores calidades.
Por otra parte, Esteban, si hablamos de competidores, ¿hay mucha competencia en este mercado, sobre todo en si hablamos de países fuera de España?
La verdad es que sí. En los últimos años; con la aparición de la nueva olivicultura, que son plantaciones de lugar en intensivo y superintensivo, donde la recolección es totalmente mecanizada y los costes de monturación son muy bajos; están entrando varios países en competencia directa con la producción española, Andalucía y, por supuesto, Jaén. Hablamos sobre todo del gran país que está creciendo en plantaciones de olivar incluso en la producción de aceite de oliva: Portugal. Este país está teniendo un crecimiento exponencial con las nuevas agriculturas muy importante, pero también lo están teniendo otros países de la cuenca del mediterráneo como son Marruecos o Túnez.
¿Qué estrategias están tomando en consideración para mantenerse competitivos en los mercados extranjeros?
Sobre todo, aumentar la calidad. Esta buena calidad es muy reconocida por los mercados internacionales, sobre todo por los países que empiezan o se incorporan al consumo de aceite de oliva. Por lo tanto, siempre ser muy exigentes con la calidad y también con la seguridad alimentaria, que es muy importante. Nosotros desde Interóleo estamos reconocidos y certificados por normas de ámbito internacional que garantizan a los clientes la seguridad alimentaria en todo el proceso y con los máximos controles de calidad. Por otra parte, hay que trabajar mucho también en la promoción; al final el aceite de oliva es ingrediente que se utiliza en la alimentación y tenemos que trabajar mucho esa cultura gastronómica, ya que el aceite no deja de ser un ingrediente para completar una alimentación sana. Hay que transmitir mucho el mensaje de salud y de que es la mejor grasa vegetal que se puede consumir.
Efectivamente. Y, Esteban, un poco para concluir, ¿cuáles van a ser vuestras líneas de trabajo, vuestra hoja de ruta a largo plazo?
A largo plazo tenemos una hoja de ruta muy clara, que es seguir aportando valor a nuestros socios y a nuestros agricultores. Interóleo lo forman 31 empresas dentro de las cuales hay un total de 17.000 agricultores a los cuales les gestionamos sus productos. Por lo tanto, seguir en la misma sintonía: aportar valor, mejorar la calidad y seguir aumentando nuestra presencia internacional.
Además, hay un aspecto muy importante que en los últimos años está aportando mucho valor. Comentaba antes que el aceite de oliva es un ingrediente fundamental para la alimentación, pero también lo es para la industria, la industria agroalimentaria. La forma de comer está cambiando a nivel mundial, cada vez hay menos comida hecha en casa que se realiza en casa y más comida de cuarta y quinta gama (lista para calentar). Por eso es necesario que la industria del aceite de oliva también entre en ese sector. Nosotros estaos ya trabajando en ello y haciendo acuerdos constantemente para tener más presencia en la industria agroalimentaria para estar presentes en la nueva forma de alimentación.