22,7 millones de euros en 2024. La facturación del Puerto de Sevilla el pasado año batió récords. Se trata de un, nada desdeñable, 9,8% más y generando 5,62 millones de euros de beneficios, o lo que es lo mismo, un crecimiento del 71,8%. Las cifras lo dejan claro, el puerto de Sevilla está a pleno rendimiento, algo que revierte positivamente en la ciudad.
Hace apenas unas semanas, Sevilla confirmaba su posición como séptima provincia española con el mejor nivel de crecimiento y, además, lidera las exportaciones andaluzas y ocupa la plaza número 11 a nivel nacional. Son 10.000 millones de euros en ventas, un crecimiento del 22,2% con respecto a 2023.
Las cifras son positivas, las perspectivas de crecimiento importantes, la influencia en la economía sevillana notable y, lo mejor de todo, no estamos solos.
Andalucía lidera el ranking de exportaciones en España. Según datos de Puertos del Estado, en 2022, los puertos andaluces gestionaron más de 100 millones de toneladas de mercancías, lo que representa aproximadamente el 20% del total de mercancías movidas en todos los puertos españoles. Este volumen de tráfico no solo refleja la importancia de estos puertos en el comercio exterior, sino que también subraya su contribución al PIB regional y nacional. En términos de empleo, se estima que los puertos andaluces generan más de 100.000 puestos de trabajo directos e indirectos, los que les convierte en un sector clave para el tejido industrial de nuestra tierra.
Los puertos andaluces, aunque con características diferentes, tienen la oportunidad de sumar un todo y de llevar a nuestra economía a un mejor puerto (nunca mejor dicho). Siempre he defendido la efectividad del trabajo en equipo por encima de los logros individuales de cada uno y considero que aquí y ahora tenemos una gran oportunidad de triunfar. Más aún cuando las exportaciones de productos andaluces, centradas por ingresos en el sector aeronáutico y olivarero, se enfrentan a un panorama internacional cargado de incertidumbre. No sabemos qué va a pasar con los anunciados aranceles norteamericanos a los productos alimentarios, la llegada del acuerdo de la UE con Mercosur puede ser una traba para los agricultores andaluces si la normativa no iguala las exigencias sanitarias y medioambientales y, por otro lado, el sector de la defensa puede sufrir grandes cambios según se desarrolle la guerra de Ucrania. ¿Qué va a pasar? No lo sabemos, pero sí tenemos una certeza: debemos estar preparados.
Vivimos un momento de cambio, un momento de incertidumbre y, por tanto, un momento de grandes oportunidades. La clave para aprovechar esta situación está clara: apostar de lleno por la implantación de la tecnología para ganar eficiencia.
La digitalización se ha convertido en un pilar fundamental para mejorar la competitividad de los puertos andaluces. Iniciativas como el Plan de Digitalización de Puertos ya están en marcha para modernizar las infraestructuras y optimizar los procesos logísticos. El Puerto de Algeciras es un claro ejemplo de ello, ya ha implementado un sistema de gestión portuaria basado en tecnologías de la información que permite un seguimiento en tiempo real de las operaciones, mejorando la coordinación entre los diferentes actores involucrados.
Mientras, en Sevilla se ha desarrollado un sistema de ventanilla única digital, que facilita la tramitación de documentos y permisos para las empresas que operan en el puerto. Este sistema, impulsado por la Autoridad Portuaria de Sevilla en colaboración con empresas tecnológicas locales, ha reducido significativamente los tiempos de espera y ha mejorado la experiencia de los usuarios.
Además de la digitalización, los puertos andaluces están adoptando soluciones logísticas innovadoras. La implementación de tecnologías como el Internet de las Cosas (IoT) y la inteligencia artificial (IA) está permitiendo una gestión más eficiente de las operaciones portuarias. El Puerto de Málaga ha comenzado a utilizar sensores IoT para monitorear el estado de las mercancías en tiempo real, lo que permite una mejor gestión de la cadena de suministro y una reducción de pérdidas.
Empresas como Acciona y APM Terminals están liderando el desarrollo de estas tecnologías en colaboración con las autoridades portuarias, contribuyendo a la creación de un ecosistema logístico más ágil y eficiente.
A medida que continúan evolucionando y modernizándose, los puertos andaluces no solo fortalecerán su papel en la economía nacional, sino que también contribuirán al desarrollo sostenible y a la competitividad de España en el ámbito internacional.
Además, no podemos olvidar la relevancia que, a todas luces, parece que tendrá el desarrollo del Valle Andaluz del Hidrógeno. Si conseguimos liderar la producción de hidrógeno verde, nuestra tierra puede liderar no solo la generación de energías limpias en Europa, sino también su exportación. Y es aquí donde los puertos andaluces tienen mucho que decir. Contamos con una ubicación estratégica para que estas perspectivas se conviertan en realidades.
Considero, por tanto, que la inversión en infraestructura y tecnología es esencial para garantizar que nuestros puertos sigan siendo motores de crecimiento y desarrollo en el futuro. En un contexto global donde la logística y la digitalización son fundamentales, los puertos andaluces ya se están transformando para adaptarse a las nuevas demandas del mercado, consolidándose como un eje estratégico en la cadena de suministro. Por tanto, la ingeniería seguirá siendo un pilar fundamental para abordar estos retos, mediante la implementación de soluciones.
La colaboración entre ingenieros, administraciones y empresas es clave para seguir impulsando el crecimiento y la competitividad de Andalucía en el ámbito portuario y al mismo tiempo ser un referente nacional. Andalucía cuenta con la ubicación idónea, con el conocimiento, la tecnología y la solidez política para seguir avanzando en su posicionamiento a escala nacional.