Ignacio, ¿qué puede contarnos sobre la historia y trayectoria de VARIcentro? ¿Cómo ha evolucionado desde sus orígenes hasta la actualidad?
Comenzamos nuestra actividad aproximadamente en el año 2002 en Huelva, con una consulta médica que buscaba implantar un modelo para tratar las varices sin necesidad de ir a quirófano, es decir, sin necesidad de operar.
Para ello, utilizamos los procedimientos terapéuticos que hasta ese momento existían vía percutánea, es decir, sin necesidad de llevar el paciente a un quirófano y someterlo a una anestesia.
A partir de ahí, y viendo los buenos resultados que obteníamos, decidimos expandir nuestro modelo clínico y progresivamente, fuimos abriendo centros médicos en diferentes provincias.
Ahora mismo contamos con 37 clínicas repartidas por toda España, donde empleamos un procedimiento ya consolidado y perfeccionado a lo largo de todos estos años, del cual tenemos completa certeza de su eficacia, como avalan los más de 45.000 pacientes satisfechos que ya se han tratado su patología venosa en nuestras clínicas.
¿Qué tipo de servicios ofrecen actualmente? ¿En qué consisten los servicios que ofrecen?
Nuestro procedimiento consiste en un diagnóstico completo y tratamiento integral de la patología venosa de los miembros inferiores.
Todos son procedimientos se hacen en consulta, de forma ambulatoria, es decir, en ningún caso necesitamos tratar a nuestros pacientes con ingreso hospitalario.
Además, cabe destacar que cuentan con un sistema propio para el tratamiento de las varices, ¿verdad?
Sí, desde hace unos 5 años aproximadamente estamos utilizando un dispositivo que nos permite hablar de procedimiento exclusivo.
¿En qué nos basamos para decir que contamos con un sistema propio? La clave del resultado de este tipo de tratamiento es la calidad de la espuma que inyectamos dentro de la vena. Por ello, hemos ido diseñando un equipo que nos permite una espuma de mayor calidad, una espuma que va a reducir los efectos secundarios y que va a conseguir un mejor efecto terapéutico con una menor concentración del producto.
¿Cuál es el proceso que ponen en marcha desde que un paciente acude a sus clínicas hasta que se le asigna el tratamiento adecuado?
En general, casi el 80% de los pacientes contactan con nosotros a través de la web o de nuestro callcenter. A partir de ahí se le da cita, para una primera valoración totalmente gratuita, que realizará nuestro equipo de flególogos, médicos especializados en el tratamiento de las varices.
Desde la primera visita que realiza el paciente para el diagnóstico, hasta que finaliza el tratamiento, la media de sesiones son una seis o siete en total. Los tratamientos son secuenciales, siempre a criterio médico. El tratamiento incluye sesiones ilimitadas y las pruebas necesarias para que el control del tratamiento sea el adecuado, hasta que el profesional considere la completamente enfermedad tratada. La duración del tratamiento es aproximadamente de dos meses.
¿Qué papel juega en todo esto la tecnología? Imagino que es fundamental, ¿verdad?
La tecnología es la clave en todo este proceso. Para conseguir un diagnóstico certero, necesitamos unos equipos ecográficos de alta calidad que nos permitan detectar cualquier tipo de patología venosa, de reflujo o de insuficiencia.
Nuestro proceso VARIsystem tecnológicamente va evolucionando para conseguir que la espuma sea de mayor calidad. Básicamente es una espuma con una burbuja muy pequeña, la más pequeña posible, para garantizar los resultados con la mayor efectividad y los mínimos efectos secundarios.
Asimismo, disponen de multitud de centros en todo el país, como bien comentaba anteriormente. ¿Qué planes tienen en materia de expansión?
Ahora mismo estamos iniciando el proyecto de VARIcentro Portugal, que sería el crecimiento natural de cualquier empresa que quisiera internacionalizarse.
Respecto a la expansión nacional, nuestro objetivo es alcanzar unas 60 clínicas para consolidar nuestra presencia y garantizar una gestión óptima y expansión más eficiente a lo largo de toda la geografía española
Es decir, que el futuro se presenta apasionante y de crecimiento en absoluto, ¿no?
Sí, para explicar adecuadamente nuestra idea voy a usar un ejemplo muy sencillo, hace 30 años, el alumno o el niño que tenía una ortodoncia era el chico raro de la clase, hoy en día el chico raro de la clase es el que no tiene una ortodoncia. Ese es nuestro deseo; que todas las personas que sufran esta patología, se trate con absoluta normalidad, que aquellas personas que tenga varices y no se haya hecho un tratamiento para eliminarlas, sean los “raros”. Que se normalice el acudir a clínicas y realizar los tratamientos convenientes para mejorar, en definitiva, la calidad de vida de las personas con Insuficiencia Venosa Crónica.
Las varices son una enfermedad con una prevalencia muy alta. El 40% de la población adulta tiene varices. Por lo tanto, nuestro objetivo es democratizar y popularizar el tratamiento de las varices. Sobre todo, con este procedimiento que no obliga a pasar por quirófano, que no es necesario someterse a una cirugía y a una anestesia; y con el que se puede continuar con el ritmo de vida habitual de cada persona.
