“Aún hay mucho por hacer en cuanto a la unificación de criterios y normativas para viajar con animales en el transporte público”
El verano es tristemente famoso por ser la época en la que se abandonan más animales. A pesar de las campañas que se hacen año a año, ¿siguen creciendo las cifras de abandono?
F.S.C: Lamentablemente es así. En España tenemos una de las tasas de abandono animal más altas de Europa y no paramos de trabajar a fin de concienciar a la población para que esta situación cambie. Según estudios publicados en 2022 (Fundación Affinity), alrededor de 285.000 perros y gatos han sido recogidos por protectoras en todo el país. Algunos de los motivos principales son la compra compulsiva de animales sin detenerse a pensar sobre la capacidad o medios que tenemos disponibles, la falta de recursos tanto económicos como de tiempo para dedicarles al día o las camadas no deseadas, entre otros.
Por eso siempre recomendamos que antes de incorporar una mascota a la familia, acudamos si es necesario a un veterinario para que nos informe sobre cuáles son las necesidades y requerimientos básicos para poder responsabilizarnos de un animal durante toda su vida.
¿Quizá uno de los problemas sea la dificultad para viajar en determinados transportes con animales o que todavía no existen un gran número de establecimientos que permitan viajar con mascotas?
F.S.C: La realidad es que cada vez lo tenemos más fácil para viajar con animales, aunque bien es cierto que aún hay mucho por hacer en cuanto a la unificación de criterios y normativas para viajar con animales en el transporte público ya que dependiendo de la ciudad en la que uno esté, podremos ir o no con nuestro perro en metro o autobús, por ejemplo.
Aunque cada vez hay más destinos “dogfriendly”, no todos los establecimientos están adaptados o aceptan mascotas, pero ante la nueva realidad en la que cada vez hay más animales de compañía en los hogares y, por lo tanto, personas que desean viajar con ellos al ser un miembro más de la familia, poco a poco se irían adecuando a esta situación.
Desde el Colegio de Veterinarios de Sevilla este verano hemos creado la campaña “Este verano que sean ellos los protagonistas” para precisamente visibilizar a todas las personas que viajan con sus mascotas y puedan mostrar “lo fácil que es”. Hemos dando las claves en cuanto a la obligatoriedad de la identificación animal, la vacunación antirrábica, el botiquín de primeros auxilios, e incluso ofrecer un listado de veterinarios autorizados con acceso a CEXGAN para quienes viajen a un país extracomunitario y necesiten un Certificado Veterinario de Salud. Podéis compartir fotos de las vacaciones con vuestras mascotas utilizando el hashtag #YoViajoConMiMascota.
Andalucía está pasando por olas de calor muy intensas que requieren también un cuidado especial de los animales. ¿Cómo tenemos que proceder en estos episodios con nuestras mascotas?
F.S.C: Es importante saber que determinados animales son más sensibles y propensos al golpe de calor, como los de mayor edad, los más jóvenes y aquellos que pertenecen a las denominadas “razas braquicéfalas”, como el Bulldog Inglés, Bulldog Francés, Carlino, etc… Algunas buenas pautas a seguir serían evitar pasear en las horas de mayor calor, privilegiar las primeras de la mañana y últimas horas del día, que el animal tenga siempre acceso a agua limpia y fresca, zonas de sombra donde podamos humedecerlos o zonas frías con hielo para las horas de mayor temperatura, no dejar a los perros solos en los coches, aunque pensemos que vaya a ser poco tiempo e intentar dar de comer al animal cuando hayan pasado las horas de mayor temperatura. Si hace mucho calor, para bajar la temperatura podemos enrollar toallas y humedecerlas con agua fría para colocarlas en la zona del bajo vientre o las axilas del animal. También existen mantas térmicas o podemos usar bolsas con hielo para colocar en estas zonas más sensibles.
Hace pocas fechas han puesto ustedes en marcha una campaña para prevenir la leishmaniosis canina en la que advierten que la prevención es fundamental. ¿Cómo se puede prevenir? ¿Es más frecuente en verano?
S.S.A: La leishmaniosis es una enfermedad parasitaria de declaración obligatoria, concretamente una antropozoonosis, que se transmite por la picadura de un insecto flebotomo que esté infectado. Por este motivo el principal punto de control de la enfermedad se centra en controlar la población de estos insectos y evitar que piquen a los animales. Esto podemos conseguirlo aplicando repelentes eficaces contra flebotomos, revisando la duración del efecto, y evitando la exposición de nuestra mascota al amanecer y al ocaso debido a que el flebotomo es un insecto de actividad nocturna, sobre todo en las zonas de riesgo. En cuanto a nuestras mascotas, el uso de collares, pipetas, incluso la vacunación frente a la Leishmania son las medidas principales para protegerlas de esta enfermedad, que también se transmite al hombre.
Efectivamente, la época de mayor riesgo comienza con el calor que es cuando comienza la actividad del mosquito, siendo de mayo hasta octubre – cuando se alarga el verano -, y con picos en junio y septiembre, aunque debido a la variación y subida de temperaturas ya estamos viendo que aparece antes, incluso que la distribución del mosquito se ha ampliado a zonas más septentrionales de la península.
En septiembre entrará en vigor la nueva Ley de bienestar animal. ¿Qué va a cambiar desde ese momento?
S.S.A: El 29 de septiembre de 2023 entra en vigor la Ley 7/ 2023 de 28 de marzo de protección de los derechos y el bienestar de los animales, pero es importante aclarar que la mayor parte de la Ley aún está pendiente de previo desarrollo reglamentario que a la fecha no se ha publicado, por lo que no sería operativa aunque entrase en vigor, y para lo cual desde la entidad colegial ya hemos puesto en manifiesto la necesidad de que se cuente con el colectivo veterinario para ello, por ser los únicos profesionales sanitarios con conocimiento y capacidad plena para atender las necesidades sanitarias y de bienestar de los animales. La referida Ley 7/ 2023 introduce una serie de cambios como la existencia de un listado de especies animales que pueden ser objeto de tenencia como animales de compañía, como por ejemplo perros, gatos y hurones, excluyendo tortugas, cobayas, reptiles exóticos y otras especies consideradas como “invasoras o peligrosas”, entre otros casos. Además, los titulares de perros deberían acreditar la realización un curso de formación para la tenencia de animales y contratar un seguro de responsabilidad civil por daños a terceros, y todos los gatos deberán ser esterilizados antes de los seis meses de edad, salvo excepciones.
En cuanto a determinadas prohibiciones, la nueva Ley establece que el sacrificio, excepto en los supuestos contemplados, siempre será realizado por un veterinario, no permitiendo que sean sacrificados los animales por cuestiones de ubicación, edad o espacio de instalaciones. Al igual que la eutanasia, que solo estaría justificada bajo criterio y control veterinario con el único fin de evitar el sufrimiento por causas no recuperables que comprometan seriamente la vida del animal.
Otra novedad va dirigida a la cría de animales de compañía, que únicamente podrá llevarse a cabo por personas debidamente inscritas en el Registro de Criadores de Animales de Compañía, y se prohíbe la comercialización de perros, gatos y hurones en tiendas de animales o por internet, además de prohibir el dejar sin supervisión a cualquier animal de compañía durante más de tres días consecutivos, no pudiendo ser superior a 24 horas en el caso de los perros.
De momento desconocemos cómo van a afectar estas nuevas medidas y cuáles serán las futuras consecuencias de la entrada en vigor, teniendo en cuenta estas y muchas otras medidas. Desde la entidad colegial pudimos manifestar nuestro descontento con la tramitación de una Ley en la que no se ha tenido debidamente en consideración al colectivo veterinario.
