El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Sevilla (APS) ha aprobado hoy el Código de Conducta Ambiental y la Guía de Buenas Prácticas para la manipulación de graneles sólidos con la finalidad de mejorar el desempeño ambiental de la operativa. Ambos documentos están dirigidos a la Comunidad Portuaria de Sevilla y suponen un impulso a la gestión ambiental, contribuyen a dar a conocer y garantizar el cumplimiento de la normativa ambiental asociada a la actividad portuaria, y establecen los principios básicos para proteger y mejorar en entorno.
En la elaboración de estos documentos ha intervenido la Comunidad Portuaria, coordinada por la APS, a través del Grupo de Trabajo para el Desempeño Ambiental adscrito al Comité de Servicios Portuarios. En este foro, los usuarios del Puerto de Sevilla han realizado aportaciones para enriquecer la gestión ambiental en ambos protocolos.
Por un lado, el Código de Conducta Ambiental ofrece a la Comunidad Portuaria la posibilidad de adhesión como vía para acercar a los usuarios del Puerto a la obtención de bonificaciones ambientales en base al artículo 245 del Texto Refundido de la Ley de Puertos del Estado y de la Marina Mercante. En concreto, estas bonificaciones a las mejoras prácticas ambientales pueden aplicarse a la tasa al buque y a la actividad, según normativa portuaria, y ya hay empresas como Terminal Marítima del Guadalquivir que han firmado un convenio con la APS para mejorar la sostenibilidad ambiental de las operaciones, y contribuir al seguimiento y monitorización del entorno.
Por otra parte, el Código de Conducta incluye un sumario con los requisitos legales en materia ambiental relativos a la gestión sostenible de los residuos, a la calidad de las aguas, del aire y suelo, consumo eficiente de los recursos, autoprotección y emergencias, ruidos, entre otros asuntos.
Respecto a la Guía de Buenas Prácticas, esta herramienta propone una serie de medidas para garantizar la sostenibilidad en toda la operativa de manipulación, carga y descarga, de graneles sólidos; en especial, para abonos y fertilizantes, chatarra, cemento, productos del agro, huesos de aceituna o astillas (biomasa), entre otros tráficos.
La Guía persigue la mejora del desempeño ambiental en las operativas de mercancías a granel a partir de la puesta en funcionamiento e incorporación en la práctica diaria de una serie de medidas de carácter organizativo, operativo, y de mantenimiento y limpieza de equipos e instalaciones. El documento propone el uso de los cañones nebulizadores facilitados por la APS; la reducción del tiempo de las mercancías almacenadas en muelle y refuerzo de la limpieza una vez finalizada la operativa; minimizar la altura de caída de la mercancía sobre la tolva y reducir el número de manipulaciones; colocar toldos o arpilleras entre el muelle y la bodega del buque; monitorizar la calidad del agua, aire y acústica, entre otras medidas.
“La excelencia ambiental en toda la operativa es una de nuestras prioridades y, en esta línea, trabajamos con los operadores del Puerto. Aunque las iniciativas ambientales recogidas en estos documentos no solo se circunscriben a nuestro ámbito competencial, hemos querido impulsar estas buenas prácticas entre las empresas portuarias como muestra de nuestro compromiso real para ser un puerto 100 % verde”, ha señalado Rafael Carmona.
El Código de Conducta y la Guía de Buenas Prácticas están publicados en la web del puerto de Sevilla en el portal de Transparencia, dentro del apartado de normativa y legislación portuaria:
https://www.puertodesevilla.com/transparencia
Servicios técnico-náuticos
Otro de los principales acuerdos del Consejo de Administración ha sido el otorgamiento de la licencia para la prestación del servicio portuario de practicaje de buques a la Corporación de Prácticos del Puerto de Sevilla y Ría del Guadalquivir. El practicaje es uno de los tres servicios portuarios técnico-náutico, junto al amarre y el remolque. Consiste en el asesoramiento a capitanes de buques a bordo para facilitar la entrada y salida al puerto y las maniobras náuticas. En el caso de Sevilla, el práctico asesora al capitán desde la zona de embarque en las proximidades de la boya de Juan Sebastián Elcano a la altura de Chipiona, entre las costas de Cádiz y Huelva.
Esta nueva licencia de practicaje, que tendrá un plazo máximo de 10 años según normativa portuaria, entrará en vigor tras su publicación en el Boletín Oficial del Estado. El presidente de la Autoridad Portuaria ha manifestado su satisfacción por este acuerdo que garantiza la prestación de un servicio clave para los puertos.
El Órgano de Gobierno también ha dado luz verde a la renovación de las licencias para los otros dos servicios técnico-náuticos, el amarre y desamarre de buques a favor Nueva Generación de Amarradores de Sevilla, y el remolque de la que es titular Remolcadores del Guadalquivir.
Balance 2024
El presidente de la APS también ha avanzado en su intervención los datos que arrojan el cierre del ejercicio. “2024 ha sido un año moderadamente bueno para el tráfico de mercancías con una previsión de cierre superior a los 4,2 millones de toneladas, lo que se estima en un crecimiento de en torno al 10 %”, ha destacado Carmona, quien ha puntualizado que, aparte del crecimiento del tráfico de mercancías, “el éxito de un puerto se mide también en el valor añadido que aporta al territorio y, ahí, el puerto de Sevilla es un buen ejemplo por la capacidad de atracción de empresas y desarrollo del tejido productivo”.
En cuanto al capítulo económico, el importe neto de la cifra de negocios superará los 22 millones de euros, con unos beneficios de cuatro millones de euros.