El Puerto de Algeciras desempeña un papel crucial en el desarrollo económico del Campo de Gibraltar, actuando como un motor de actividad económica en la región. Su ubicación estratégica lo convierte en uno de los puertos más importantes del Mediterráneo, facilitando el comercio internacional y la conexión entre Europa y África, siendo un punto clave para el tráfico de pasajeros y los servicios de ferry hacia Marruecos. Por otro lado, el desarrollo del puerto ha impulsado a muchas empresas locales y ha creado numerosos empleos en diversos sectores como logística, turismo y servicios marítimos. En conjunto, estas características hacen del Puerto de Algeciras un elemento vital no solo para la economía comarcal, provincial, autonómico y/o nacional, sino también para facilitar el comercio intercontinental en un mundo cada vez más interconectado.
Si bien esto es solo la punta del iceberg. La realidad es que el Puerto de Algeciras no desempeña el papel que debería porque actualmente es solo un puerto de tránsito. No es la entrada a Europa del comercio entre Asia y América. El Puerto de Tanger MED es nuestra mejor competencia actualmente y de esto hablamos otro día.
La Comarca del Campo de Gibraltar, a lo largo de la historia, ha tenido muchos más titulares por narcotráfico o por llegada de personas que llegan buscando un mundo mejor que por la repercusión económica “crucial” de El Puerto de Algeciras.
El futuro económico del Campo de Gibraltar está intrínsecamente ligado a la expansión y modernización del puerto. La inversión en infraestructura, como el tan demandado FERROCARRIL que conecta el puerto con Europa, es fundamental y necesario para mejorar la logística y aumentar la competitividad. Además, se han desarrollado zonas de actividades logísticas alrededor del puerto, lo que no solo optimizará en un futuro las operaciones comerciales, sino que también contribuirá a generar empleo, y a atraer nuevas empresas al área. Asimismo, se están implementando iniciativas para fomentar la sostenibilidad en las operaciones portuarias, promoviendo el uso de energías renovables y prácticas respetuosas con el medio ambiente. Estas medidas no solo beneficiarán al ecosistema local, sino que también posicionarán al Campo de Gibraltar como un referente en innovación y responsabilidad social. En este contexto, es crucial que todas las administraciones públicas colaboren estrechamente para garantizar una planificación adecuada y maximizar los beneficios de estas inversiones. Con un enfoque adecuado, el puerto del Campo de Gibraltar podría convertirse en un motor económico clave para la región durante las próximas décadas, transformando su potencial en oportunidades reales para todos sus habitantes.
Los números hablan por si solos. El Puerto Bahía de Algeciras superó en 2023 los 100 millones de toneladas por octavo año consecutivo. Este volumen de actividad le consolida como líder en tráfico total del Sistema Portuario Español y uno de los cuatro principales puertos europeos tras los gigantes Rotterdam, Amberes y Hamburgo. Mantiene una conexión directa con 200 puertos del mundo a través de 142 servicios regulares y 23 líneas navieras, y sus terminales de contenedores, APM Terminals Algeciras y Total Terminal International Algeciras, atienden cada año más de 200 megabuques de entre 16.000 y más de 24.000 TEUs.
Pero no hemos de ser cínicos ni morir de éxito contemplando desde la lejanía lo que podemos llegar a ser. El sistema territorial es una construcción social que representa el estilo de desarrollo de una sociedad que ha de ser promovida, fomentada, liderada y ejecutada por la intervención de todos los responsables políticos que crean, al igual que creemos todos los campogibraltareños y campogribraltareñas, que esta comarca anhela de unas inversiones reales en infraestructuras que nos permita convertirnos en la verdadera puerta de entrada de las mercancías que lleguen por vía marítima y tenga que llegar por vía terrestre a su destino en cualquier lugar de Europa. Y esto solo se consigue llevando a la práctica una serie de interacciones económicas que proporcione acceso y movilidad a nuestra comarca en busca de acabar con los desequilibrios actualmente existentes en el desarrollo de los puertos contra los que competimos y que históricamente han contado con la intervención voluntaria y dinámica del Estado a la hora de ejecutar grandes obras de infraestructuras y proyectos de inversión.
Dicho de otra forma, clara y contundente, El Puerto de Algeciras depende de una sola intervención: la conexión ferroviaria del corredor del Mediterráneo. Más de un siglo después sigue sin esa infraestructura vital para su futuro.