M2R AgroFarm, se dedica a la producción sostenible de proteína a través de la cría de insectos, “específicamente el tenebrio molitor, conocido como gusano de la harina. Este insecto es una fuente excepcional de proteínas de alta calidad, además de contener grasas naturales, vitaminas y minerales esenciales. Actualmente, estamos enfocados en la comercialización de productos derivados de estos insectos para la alimentación animal, pero estamos dando los primeros pasos hacia nuestro objetivo final que es expandirnos hacia el mercado de consumo humano, produciendo harina de insecto y aceites derivados”, explica Manuel Rodríguez que creo esta empresa por “el enorme impacto social, económico y medioambiental que este tipo de proyecto puede generar. Las posibilidades de sostenibilidad y crecimiento que ofrece la cría de insectos son inmensas, ya que promueven un modelo de economía circular, reducen residuos y minimizan el impacto ambiental. Vimos una oportunidad única para contribuir a resolver problemas globales relacionados con la alimentación y el medio ambiente”.
Manuel y Miriam decidieron desarrollar un proyecto que fuese beneficioso para la sociedad, “queríamos crear algo que no solo fuera rentable, sino que también tuviera un impacto positivo significativo en la comunidad y en el medio ambiente. La visión de poder aportar soluciones innovadoras y sostenibles nos motivó a dar este paso”, aunque reconocen que “el camino del emprendimiento en el sector biotecnológico es muy complejo por los desafíos técnicos y regulatorios, así como la necesidad de grandes inversiones iniciales para desarrollar las instalaciones y los procesos de cría”.
“Emprender en nuestra zona es extremadamente importante. Creemos en el potencial de generar empleo local y contribuir al desarrollo económico de nuestra comunidad. Además, queremos demostrar que incluso en áreas rurales, es posible llevar a cabo proyectos innovadores y sostenibles que pueden tener un impacto global”.
