El Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) ha publicado hoy la resolución que crea la categoría de podólogo en los centros sanitarios del Servicio Andaluz de Salud. Este hito marca un avance significativo en la estructura del sistema público de salud andaluz, adjudicando a los podólogos naturaleza estatutaria, y que reconoce su capacidad diagnóstica y prescriptora. La medida supone la presencia de especialistas en Podología en la sanidad pública, contribuyendo a mejorar la calidad de atención en casos que requieren cuidados específicos del pie.
La presidenta del Ilustre Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía (COPOAN), Rosario Correa, agradece el compromiso de la Consejería de Salud y Consumo en la atención podológica de la ciudadanía. En sus palabras: “La incorporación del podólogo a la sanidad pública es un paso necesario para garantizar una correcta atención a las patologías del pie, especialmente, en casos complejos como el manejo de enfermedades crónicas y el Pie Diabético”. Asimismo, ha subrayado que esta medida permitirá que muchos pacientes, que hasta ahora solo podían acceder a estos servicios a través de la sanidad privada, reciban un tratamiento especializado y de calidad en el sistema público.
Esta resolución llega tras una serie de reuniones transversales que han tenido lugar durante más de cinco años entre los representantes de la Junta del Ilustre Colegio Profesional de Podólogos de Andalucía y los responsables de la Consejería de Salud y Consumo. Este esfuerzo conjunto culminó el pasado mes de febrero cuando la exconsejera de Salud, Catalina García, adelantó la intención de crear esta nueva categoría profesional dentro del SAS, que ahora ratifica la nueva administración liderada por Rocío Hernández.
El documento publicado por la Junta de Andalucía detalla que los podólogos tendrán plenas competencias de sus funciones profesionales. Además, el texto establece las retribuciones básicas y complementarias asociadas a la categoría profesional estatuaria de podólogo.
Según Rosario Correa, “Esta resolución supone un gran paso adelante en el reconocimiento de la importancia de la Podología en el sistema de salud pública y la figura del podólogo, que es un profesional sanitario con facultad prescriptora y está cualificado para el diagnóstico y tratamiento de las patologías y afecciones del pie de forma autónoma. Ahora bien, para que esta incorporación sea efectiva, es vital que se creen suficientes plazas de podólogos en los centros sanitarios públicos, lo que permitirá ofrecer un servicio completo, accesible y de calidad a la población”.
La presidenta añade que desde la Junta del COPOAN seguirán trabajando de la mano de las instituciones para garantizar que la implantación de esta nueva categoría profesional en el SAS se lleve a cabo con los recursos necesarios, asegurando una atención integral y de calidad a los pacientes andaluces. Este avance marca un punto de inflexión para la Podología en la región, abriendo la puerta a nuevas oportunidades de salud para los profesionales y fortaleciendo la sanidad pública en su conjunto y en el reconocimiento del carácter sanitario de la profesión.
A nivel profesional, la Corporación seguirá luchando para conseguir sus objetivos iniciales que ya fueron expuestos a la Administración Sanitaria en el mes de febrero de 2024 tras la publicación del borrador de la presente resolución. Entre ellos, el encuadre de la Podología dentro de la Estructura Funcional de las Plantillas a la División Médica y, por tanto, dentro del grupo Profesional A1 en consideración a los niveles del Marco Español de Cualificaciones para la Educación Superior del Marco Europeo (Niveles MECES), por cuanto la autonomía competencial del profesional de la Podología lo dota del carácter facultativo exigible al personal médico. Asimismo, lo asimila en el ámbito de sus competencias a esta categoría profesional con la asunción de un mayor ámbito de responsabilidad en la prestación de servicios, de forma que esa especial cualificación debe verse reflejada en retribuciones y reconocimiento profesional acordes a la formación, competencias y responsabilidad del podólogo.