“Queremos
vincular nuestra
actividad a la
innovación”
¿Qué líneas estratégicas ha pretendido seguir desde su incorporación como Delegada de Zona Franca de Tenerife?
La Zona Franca de Tenerife tiene una posición geoestratégica privilegiada. A lo largo de los años, hemos buscado posicionarla como un territorio muy atractivo para la inversión empresarial canaria, peninsular y, sobre todo, de terceros países. Pretendemos fijar actividades a largo plazo de manera que la globalización no nos afecte tanto a la hora de localizar las empresas en momentos de crisis.
Por tanto, es importante la promoción de la Zona Franca en todos los ámbitos posibles. Los territorios que tiene asignados se concentran en el Puerto de Santa Cruz, que son la dársena pesquera, de casi 182.000 metros cuadrados, y la dársena de Los Llanos, de aproximadamente 56.000 metros cuadrados. No obstante, el ámbito teórico de la Zona Franca es provincial, al igual que la de Gran Canaria.
Es cierto que todos hemos oído hablar de la Zona Franca, pero muy pocos conocen las verdaderas ventajas de establecerse en la misma, ¿no cree?
La Zona Franca de Tenerife ofrece ventajas aduaneras, fiscales y simplificación de trámites aduaneros, en relación con las importaciones y exportaciones, que, en el caso de Canarias, se suman a las de establecerse en la Zona Especial Canaria (ZEC). Lo que pretende la Zona Franca es la internacionalización de la economía, así como su diversificación y sostenibilidad. A su vez, permite realizar cualquier tipo de actividad comercial, industrial o de prestación de servicios así como su diversificación y sostenibilidad.
Existe una necesidad de crear sinergias con otras organizaciones y empresarios y es una acción fundamental para usted, según nos ha comentado. ¿Creen que la Zona Franca es una oportunidad de inversión en este sentido?
Nosotros consideramos que la Zona Franca es una herramienta económica polivalente que necesita muchos actores para desarrollar todo su potencial, y servir al interés general, en términos de promoción de la actividad económica tanto en Tenerife como en Canarias. Hablamos de la sociedad civil y del tejido productivo empresarial. En el pleno de la Zona Franca existen dos entidades significativas que son la Cámara de Industria, Comercio y Navegación de Santa Cruz de Tenerife y la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) y esto denota la importancia de la zona para internacionalizar la economía de Tenerife desde dentro hacia fuera y viceversa.
Pero si el empresariado no confía en esto caminaremos hacia una base fundamentada en el sector terciario vinculado al turismo, que en momentos de crisis como este, con problemas de movilidad, se ha visto perjudicado. Tenemos que diversificar nuestra economía y no estar a expensas de terceros. La Zona Franca aporta beneficios en este sentido, como la exención total de aranceles e impuestos sobre mercancías con origen y destino en terceros países no pertenecientes al Territorio Aduanero de la Unión Europea, suspensión de las obligaciones arancelarias y tributarias de las mercancías hasta el momento de su consumo o despacho a libre práctica en el territorio aduanero de la Unión, simplificación de trámites aduaneros.
Además, permite el almacenamiento indefinido de mercancías, manipulaciones usuales y transformaciones usuales, previa autorización de la aduana. Esto otorga una capacidad de tesorería notoria.
¿Por qué es importante para ustedes la innovación?
Consideramos que el I+D+i mejora las condiciones medioambientales, de producción y de empleo. Son tres factores importantes vinculados a los Objetivos de Desarrollo Sostenible 2030 y especialmente contemplados en los fondos de resiliencia españoles y de la Unión Europea. Además, creemos que estancarnos en una industria tradicional nos aboca a su desaparición, por lo que queremos vincular nuestra actividad a la innovación. El empresario apuesta por esto porque mejora el rendimiento y las condiciones laborales de los empleados. Todo ello supone la necesidad de un nivel de formación elevado para dar salida a muchos profesionales capacitados.
¿Qué objetivos les gustaría conseguir como Delegada de la Zona Franca?
Nuestro principal objetivo es que se ocupen todos los terrenos actualmente disponibles en la Zona Franca de Tenerife, porque ello supondrá que mejoran el empleo, la productividad, la diversificación y la internacionalización de nuestra economía, de tal manera que haya una mejora en la productividad de la isla generando empleo y riqueza más allá de la que aportan otros sectores.
A nivel medioambiental y urbanístico, las empresas instaladas deben cumplir con todos los requerimientos necesarios. De hecho, contamos con una fábrica de chocolate y otra de hipoclorito. La otra apuesta es la dársena de Granadilla, que tiene unas ventajas indudables en cuanto a su cercanía con lugares de interés como el aeropuerto del sur, el Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), una planta de tratamiento de residuos y un parque eólico.
