Miguel Ángel Rodríguez Ramírez cumplirá 10 años al frente de dirección de Guaguas Municipales el próximo mes de agosto. Bajo su gestión, la compañía pública de transporte de Las Palmas de Gran Canaria ha logrado remontar su histórica fragilidad financiera y situarse entre las entidades más destacadas del sector. Sin embargo, los efectos de la pandemia han castigado con dureza a la empresa municipal, que lentamente recupera el pulso.
Trece meses después de declarada la pandemia, ¿cuál es la situación en la empresa?
La irrupción de la covid-19, en marzo del año pasado, cortó de raíz nuestro imparable crecimiento, que había superado la barrera de los 38,5 millones de viajeros en 2019, la mejor cifra de los últimos 15 años. Actualmente, la pandemia nos ha trasladado a un escenario crítico y extraordinario. En fechas recientes hemos presentado, ante nuestro consejo de administración, pérdidas por valor de 1,3 millones de euros y una disminución radical de un 35% en la cifra de viajeros durante el año pasado, de 38,5 a 24,9 millones. A pesar de esta perspectiva, a pesar de las dificultades del año pasado y de las que nos esperan para este 2021, Guaguas Municipales seguirá trabajando para mejorar el servicio de guaguas municipales. No obstante, dentro del descalabro general en nuestro sector, hemos sido de las compañías urbanas de transporte que comparativamente ha perdido menos porcentaje de viajeros en esta delicada situación.
Nos dibuja un escenario crítico y extraordinario por la crisis sanitaria, en el día a día de la compañía de transporte, ¿donde se aprecia?
No hemos escatimado en recursos para implementar medidas que garantizaran tanto la salud de todos los trabajadores como la de los clientes, a través del refuerzo de las actividades de limpieza y desinfección en los vehículos, instalación de mamparas en el puesto de los conductores, dispositivos de gel hidroalcohólico y cartelería de prevención, al tiempo que se han realizado esfuerzos suplementarios para obtener la certificación Global Safe Site, realizada por la auditora Bureau Veritas, que acredita más de 100 medidas preventivas frente a la enfermedad. Nos hemos volcado en conservar e incrementar la confianza de nuestros viajeros.
¿Cómo ha sido el impacto de la enfermedad en los trabajadores?
La covid-19 nos ha afectado en la misma proporción que al resto de los ciudadanos, porque somos parte indivisible de la sociedad donde vivimos. La enfermedad, como en cualquier otro sector, ha tenido consecuencias directas en el servicio por el aumento del absentismo laboral a causa de las bajas de personal de riesgo, infecciones activas, periodos de cuarentena por contactos estrechos o el retraso en la resolución de bajas de otra tipología por el colapso sanitario, que han limitado la oferta habitual. De hecho, no hemos podido recuperar aún la totalidad de nuestra oferta de servicio previa a la época del confinamiento.
No han parado el servicio de transporte ni en las peores circunstancias.
Exacto. Hemos realizado un esfuerzo extraordinario para adaptarnos a cada nueva circunstancia. En este largo camino del último año hemos logrado implementar con éxito, muchas veces a contrarreloj, resoluciones, normativas, obligaciones, recomendaciones… Aunque lo primero que hemos logrado es la implicación de toda nuestra organización. Hay que subrayar que ha sido trascendental el desempeño, desarrollo y profesionalidad de los trabajadores de la compañía municipal que, durante todo el transcurso de la crisis sanitaria, han estado operando de manera responsable y comprometida con este servicio público que es esencial. Hemos demostrado, una vez más, ser una empresa fiable y muy competente, lo que es reconocido por la ciudadanía.
¿Qué pasos están dando para conseguir que los viajeros vuelvan a subirse a las guaguas?
El transporte público ha sufrido una campaña de demonización desde el inicio de la pandemia que no está justificada de ninguna manera. Estamos restando esa herida a través de la generación de información científica de primer nivel. Recientemente hemos participado en un estudio a bordo de los vehículos de Guaguas Municipales, llevado a cabo por el equipo del doctor José Gilberto Moreno, experto en covid-19 de la Organización Mundial de la Salud y director del Museo de la Ciencia, que concluye de forma inequívoca algunos aspectos esenciales: primero, los estudios y datos analizados durante la pandemia no han detectado brotes de la covid-19 en las líneas de guaguas; segundo, el conjunto de medidas de prevención y protección frente a la covid-19 establece un rango de seguridad sobresaliente en nuestros vehículos; y tercero, los índices de calidad del aire a bordo de los vehículos registran niveles de excelencia en todas las líneas de guaguas analizadas. Por lo tanto, una vez más, garantizamos a los viajeros un alto estándar de seguridad en sus trayectos, siempre que ellos usen correctamente la mascarilla.
Y además siguen realizando inversiones en nuevas guaguas.
A pesar de estar inmersos en un momento complejo y de incertidumbre general, hemos acelerado el ritmo de inversiones y seguimos apostando firmemente por la consolidación de una movilidad en la ciudad orientada a modelos ambientalmente sostenibles y saludables, más agradables para transitar y, en definitiva, más habitables. Hemos adquirido 47 nuevos vehículos, y en las próximas semanas se incorporarán diez más con tecnología híbrida, lo que hará que reduzcamos la edad media de nuestra flota en casi dos años, con lo que este hecho implica en la mejora de la calidad en la prestación de nuestro servicio, su modernización y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. Tenemos proyección hacia el futuro con el objetivo de no perder el ritmo y ser capaces de seguir dando la talla en las mejores circunstancias, cuando esta situación se apacigüe lo suficiente.
Habla de compromiso con el medioambiente, ¿de qué manera lo sustentan?
Por definición, el transporte público es medioambientalmente sostenible. Solo el hecho de que 100 personas se suban a la guagua y no utilicen el equivalente a 50 coches para sus trayectos por la ciudad nos otorga una merecida etiqueta de sostenibles. Y si además, la propulsión de las guaguas es la más limpia posible, el beneficio para todos los ciudadanos se multiplica. La estrategia de Movilidad de Las Palmas de Gran Canaria, liderada por José Eduardo Ramírez, se alinea plenamente con las visiones europeas más progresistas en materia de sostenibilidad. Durante 2020, las políticas de Movilidad de la ciudad, con Guaguas Municipales como uno de los principales vectores, recibieron dos reconocimientos europeos: Winner of the Greening The Island 2020 Sustainable Mobility Award y Civitas Resilence, por el paquete medidas implementado por el Ayuntamiento capitalino durante la época más crítica de la crisis de la covid-19. Estos galardones se unen a la capacidad del área de Movilidad para implementar y ejecutar la totalidad de los proyectos financiados por el programa Civitas Destinations de la Unión Europea, dotado con 2,7 millones de euros, que han impulsado una decena de soluciones innovadoras para mejorar los patrones de movilidad y la calidad de vida de los residentes y turistas.
La MetroGuagua es el proyecto estrella que está por llegar.
Es una apuesta por el perfeccionamiento del transporte público y la movilidad en general de la ciudad, de la parte alta y baja. Además de transformar el sistema de transporte, el proyecto tiene la aspiración y capacidad de mejorar los tramos por donde transcurre, como ya sucede en Mesa y López, calle Galicia o Blas Cabrera Felipe. En estos momentos, estamos forjando una alianza con el Gobierno de Canarias para tener acceso a recursos adicionales que ha liberado la Unión Europea en sus diferentes planes, sobre todo, los denominados fondos Next Generation para la adquisición de vehículos más modernos y sostenibles, que puedan ofrecer un servicio excelente de transporte público.