El puerto de Santa Cruz de Tenerife acogerá en los próximos meses una nueva actividad empresarial consistente en la fabricación de plantas de electrólisis para exportación, negocio al que se destinará una parcela de 4.638 metros cuadrados ubicada en los terrenos de la Zona Franca portuaria.
Esta iniciativa cuenta desde hoy con el visto bueno del Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria, reunido en sesión ordinaria bajo la presidencia de su titular, Carlos González Pérez, que acordó el otorgamiento de una concesión administrativa al efecto a Welysis Industries, S.L., por un plazo inicial de veinte años.
De acuerdo con el proyecto básico redactado por la empresa ya concesionaria, se pretende construir plantas químicas de electrólisis operadas remotamente desde un centro de control que también se instalará en la parcela portuaria. En una primera fase, las plantas de electrólisis que se construyan se destinarán principalmente al mercado africano y europeo, y además se incluirá en el servicio la impartición de la formación necesaria para su funcionamiento.
En este sentido, desde el citado centro de control remoto se dará soporte a los clientes a través de un centro de atención especializado que también servirá para impartir cursos de formación y reciclaje a los operarios de las plantas, así como proyectos de I+D+I, lo que lo convertirá, según sus portavoces, en “centro estratégico y neurálgico con terceros países”
Las plantas de electrólisis se conciben como plantas industriales modulares en las que se fabricará como producto principal hipoclorito sódico, cuya disolución en agua es conocida como lejía o cloro, aunque también podrán fabricar ácido clorhídrico y sosa.
Persigue así la empresa ofrecer soluciones eficientes a poblaciones alejadas, donde el acceso al agua potable aún no está asegurado, el transporte de hipoclorito sódico es complicado y donde las plantas de electrólisis a pequeña escala pueden instalarse garantizando un producto de primera calidad a costos competitivos.
Precisamente la actividad que desarrollará Welysis Industries S.L., se enmarca entre los condicionantes para autorizar su inscripción en Zona Franca Tenerife, concretamente la importación y exportación de materiales o servicios desde terceros países, o sea, los que se encuentran fuera del código aduanero de la Unión Europea.
Se prevé que dicha iniciativa no solo diversifique el sector productivo de Canarias sino que además genere una importante oportunidad de negocio en el sector de las energías renovables y la eficiencia energética.
Y es que, ya en una segunda fase y en función del crecimiento de la compañía, se pretende estudiar procesos industriales vinculados a las plantas de electrólisis y establecer programas pilotos donde desarrollar iniciativas como el aprovechamiento del hidrógeno proveniente de las plantas de electrólisis salina en vehículos con cero emisiones contaminantes.